El pasado 11 de septiembre, desde la cuenta de @ViaBTC_Spanish se organizó un Space en X, centrado en que se debe hacer para aumentar la longevidad y eficiencia de los mineros ASIC. En este evento, José Rafael Peña, SNS Manager de ViaBTC, entrevistó a Arturo Prieto, un experto con nueve años de experiencia en la instalación, reparación y mantenimiento de hardware minero, quien actualmente opera centros de reparación en Estados Unidos y mantiene operaciones mineras en México y Colombia.

Prieto subrayó que el rendimiento óptimo de un equipo ASIC depende de la ejecución rigurosa de tres etapas fundamentales: una instalación adecuada, el mantenimiento preventivo constante y la atención especializada en la reparación.
I. Instalación: El cimiento de una granja de minería
El paso inicial y más crítico antes de adquirir cualquier equipo, ya sea para minería doméstica o industrial, es la evaluación exhaustiva de la capacidad eléctrica. Es crucial inspeccionar el transformador al que se está conectado, el cableado que desciende hacia el medidor principal y la distribución interna del cableado que llega al tablero.
Arturo enfatiza que la falta de capacidad eléctrica o un cableado deficiente puede resultar en daños graves a los equipos.
Puntos claves que destacó sobre la instalación:
- Capacidad doméstica: A nivel doméstico, cinco o seis equipos se considera el monto máximo antes de requerir una ampliación significativa de cableado o transformador. Una granja pequeña o de hobby se puede considerar a partir de diez equipos.
- Selección de equipos: Actualmente, Prieto recomienda los Whatsminer M30s (de 90 a 110 terahashes) por su relación entre costo y poder de procesamiento, ofreciendo una buena eficiencia para las operaciones.
- Minería con Antminer S9 y bajo hashrate: Los equipos con baja hashrate, como el S9, que apenas rinden unos 50 o 60 centavos de dólar diario, solo son rentables si la electricidad es prácticamente gratuita. Una alternativa para estos equipos es intentar la minería en la modalidad "SOLO" en un pool.
- Futuro del enfriamiento: La tendencia industrial se dirige al hidroenfriamiento y la inmersión (como los modelos Whatsminer Hidro o S21 Hidro). Aunque el costo inicial de infraestructura es mayor, estas tecnologías permiten un mayor procesamiento en un espacio reducido y reducen la necesidad de mantenimiento al evitar la exposición al polvo y la humedad ambiental.
II. Mantenimiento preventivo: Una inversión crítica
El mantenimiento debe ser visto como una inversión que prolonga la vida útil del hardware. Un ASIC bien cuidado puede durar años, mientras que uno descuidado puede fallar en semanas. De acuerdo, a Arturo se debe seguir un programa de mantenimiento preventivo y periódico, siguiendo estos pasos generales.
Protocolo de mantenimiento:
- Condiciones ambientales: La recomendación principal es mantener buenas temperaturas y una ventilación adecuada. El área debe estar limpia y libre de polvo para asegurar un funcionamiento óptimo.
- Limpieza regular: Se aconseja un mantenimiento preventivo cada dos o tres meses, utilizando aire comprimido para remover obstrucciones. Si se requiere un lavado profundo, la única sustancia recomendada es alcohol isopropílico al 99%. Prieto advierte que limpiar los equipos con agua, gasolina u otros químicos es un error común que debe evitarse.
- Cambio de pasta térmica: La pasta térmica debe ser reemplazada cada seis meses a un año, o si el equipo muestra signos de recalentamiento. (Nota: Los S9 no requieren este cambio, ya que sus chips están pegados con resina epóxica al disipador).
Señales de alerta y consejos para tener un buen monitoreo
Los errores más usuales que cometen los mineros incluyen limpiar con líquidos inadecuados, no cambiar la pasta térmica e ignorar los ventiladores defectuosos.
- Indicadores de falla: Preste atención a ventiladores con ruidos extraños, chips defectuosos reportados en la interfaz del equipo, inestabilidad de voltaje en la fuente de poder o aumentos repentinos de temperatura.
- Software de monitoreo: Existen firmwares de terceros que ayudan a detectar estas anomalías antes de una falla mayor. La actualización del firmware solo se recomienda cuando el fabricante lanza una mejora sustancial, como en seguridad, estabilidad o la capacidad de minar en modo de bajo consumo eléctrico.
III. Reparación y detección de Averías
Para el experto Arturo Prieto, los equipos de la línea Whatsminer son los más robustos y requieren menos reparación. En cambio, los equipos de Bitmain presentan una gran variación de la tecnología de las tarjetas (hasta 10 tipos diferentes en la misma serie), lo que complica la compatibilidad y disponibilidad de repuestos.
En el Space, resumió varios aspectos que considera importantes a la hora de reparación y detección de averías es equipos de minería ASIC:
- Fallas comunes: Las partes que estadísticamente fallan con mayor frecuencia son los ventiladores y los sensores de temperatura.
- Momento de buscar un xeperto: El punto crítico para solicitar ayuda profesional es cuando el equipo deja de minar o cuando, tras realizar el mantenimiento básico (limpieza y cambio de pasta térmica), el software sigue reportando fallas de chip en la hashboard.
- Límites de reparación: Si una tarjeta solo tiene dos o tres chips dañados por recalentamiento y la placa no se dobló, es reparable. No obstante, una tarjeta con 30 o 40 chips quemados es irrecuperable y se debe remplazar.
- Desafíos extremos: Prieto ha enfrentado reparaciones complejas en tarjetas corroídas por operar cerca de la costa. Estos casos requirieron el uso de químicos especializados, máquinas de ultrasonido y un proceso de reflow en horno.
- Adquisición de repuestos: Los componentes menores de la tarjeta (Mosfet, LDO, sensores de temperatura, etc.) son generalmente universales y pueden adquirirse de terceros. Sin embargo, el chip ASIC específico para cada tarjeta debe obtenerse directamente del fabricante o de un proveedor especializado.
El Space concluyó con un repaso de los puntos clave compartidos por Arturo Prieto y con preguntas de los mineros asistentes, lo que reafirmó la importancia de una instalación adecuada, un mantenimiento preventivo riguroso y una reparación especializada para maximizar la vida útil y el rendimiento de los equipos ASIC.